“La importancia de la constitución es que diciendo poco va a mandatar de manera clara y comprometida a las futuras autoridades” sostuvo el abogado y académico, Agustín Squella, durante el encuentro “Nueva Constitución y envejecimiento: ¿Cómo garantizar ecosistemas amigables con las Personas Mayores?” que incluyó a candidatas y candidatos a constituyentes por el distrito 7 y que fue organizado por el Consejo Ejecutivo Mixto del Centro Gerópolis de la Universidad de Valparaíso.
En la reunión virtual, que fue inaugurada por Osvaldo Corrales Jorquera, rector de la Universidad de Valparaíso y Juan Pinilla, dirigente Social Adulto Mayor, representante de la Asociación Arturo Pratt, abordó cuatro temáticas: vivienda, salud, previsión social y comunidad. En el debate, moderado por Tamara Díaz, representante Fundación Como Roble y miembro de Travesía, 100 participaron también los candidatos Jeanette Bruna (Vamos por Chile); Alberto Ormeño (Poder Constituyente a toda costa), Josefina Rodríguez (Parto Social) y Antonio Páez en reemplazo de Pamela Contreras (Partido de Trabajadores Revolucionarios), quien se excusó por un problema sanitario.
En el tema de la vivienda para adultos mayores Squella sostuvo que “las constituciones respecto de ningún asunto resuelven todo, pero fijan ciertos principios generales que van a ser vinculantes; el derecho a una vivienda digna estará como un derecho social consagrado y garantizado, pero en el caso de los adultos mayores podría haber adicionalmente una especificación que establezca que cuando no tengan esa vivienda digna, sean protegidos. En el entendido que lo demás no va a depender de la constitución, sino que de las políticas públicas, de leyes ordinarias, resoluciones administrativas y sentencias de los jueces que obligadamente van a tener que ir más allá de lo que diga la constitución y proveer de asistencia y cuidado integral. La importancia de la constitución es que diciendo poco va a mandatar de manera clara y comprometida a las futuras autoridades”.
En materia de salud el Premio Nacional de Humanidades indicó que “no podemos vaciar en el texto constitucional todas nuestras expectativas y desde esa perspectiva creo que entre los derechos sociales la nueva constitución no podrá dejar de declarar el derecho a una atención sanitaria oportuna y de calidad, y tanto de manera curativa como preventiva y que se extenderá a los a veces largos periodos de recuperación. Necesitamos un sistema público de salud universal para todos, no sólo para los más necesitados, y sin perjuicio de que quienes quieran puedan contratar seguros de salud privados”.
FIN AL SISTEMA DE AFP
En cuanto a la protección social el profesor Squella puso énfasis en que “el sistema de AFP nunca estuvo pensado para asegurar pensiones justas y oportunas, sino para inyectar recursos a la alicaída economía de los 80. Es impresentable que se haya hecho de la satisfacción de un derecho fundamental un negocio. Por eso creo que Chile no necesita una reforma previsional porque lo central es que no podemos seguir con el mismo sistema; hay que asumir el diseño, y eso no lo podrá hacer la constitución por sí sola, de un sistema completamente distinto al que tenemos y dejar de seguir maquillándolo”.
Sobre comunidad y adulto mayor el candidato remarcó que el Estado y la sociedad deben crear condiciones para crear comunidades, pero no forzar: “Las personas mayores sabrán qué tipo de asociación hacen y lo mismo con los jóvenes o los trabajadores. Es un derecho que va acompañado con la libertad de los distintos segmentos de la sociedad para decidir con autonomía cuál es la mejor forma de asociarse. Pueden, incluso, haber asociaciones intergeneracionales”.
Finalmente, el académico recomendó la lectura de dos libros: “Senectute, que Cicerón escribió 44 años AC y que apunta a cómo vivir la vejez desde el punto de vista de uno mismo y otro de Norberto Bobbio quien a finales del siglo XX escribió un libro del mismo nombre, pero que va un poco en contra de la visión idealista de Cicerón y aborda la vejez como una época más propicia a la desvalidez”.
