Dos años dura el inédito programa de fluoración en el que participan mujeres privadas de libertad y que se podría repetir con la población masculina.
Con la intención de mejorar la salud bucal de las mujeres privadas de libertad del Centro Penitenciario Femenino de Valparaíso este martes se desarrolló la segunda etapa de un plan de fluoración que comenzó a principios de año y que se extenderá hasta el 2018.
Este programa, que llevan adelante dos profesionales de salud del área, comenzó con 80 internas condenadas y este martes fueron atendidas 56 de ellas. Las restantes ya se encuentran en libertad o fueron trasladadas a otra unidad penitenciaria.
Luis Núñez, coordinador regional de salud de Gendarmería, destacó la importancia de esta iniciativa que por primera vez se aplica en un establecimiento penitenciario de la región.
“Hace aproximadamente ocho meses atrás se efectuó el primer proceso, que tiene que ver con la pincelación de una película de flúor en todas las piezas dentales de las internas y que favorece la protección y disminuye la aparición de caries. Esto se repitió ayer (martes) a las pacientes que ya se habían efectuado el primer proceso. El próximo año se hará una evaluación para ver como repercutió positivamente, que es algo que ya está comprobado internacionalmente”.
Núñez agregó que en el futuro se espera repetir este programa con otras poblaciones penales de la región, el que nuevamente estaría a cargo del cirujano dentista Patricio Meléndez, y la técnica odontológica, Ximena Salinas, encargados de salud dental del personal de Gendarmería.
OPERATIVO MASCULINO
De forma paralela Junaeb llevó a cabo la primera de tres jornadas de atención oftalmológica para la población masculina del Complejo Penitenciario de Valparaíso. En total fueron 50 los reclusos que accedieron a exámenes visuales como parte de un programa de atención que lleva adelante la institución pública y que se suma al de entrega de útiles escolares.
El director regional de Junaeb Valparaíso, Marcelo Góngora, destacó que: “Estamos muy contentos de poder concretar por tercer año una de las iniciativas que fue piloto para Junaeb en conjunto con el Ministerio de Justicia y Gendarmería que ha permitido igualar las condiciones en que los estudiantes de las escuelas carcelarias se encuentran con las escuelas regulares. Nosotros no solamente hemos implementado el programa de útiles escolares, sino que además hemos implementado los servicios médicos”.
Por su parte el jefe (s) del Complejo Penitenciario de Valparaíso, mayor Víctor Muñoz, sostuvo que: «Al interior de nuestro recinto penitenciario funcionan tres establecimientos educacionales, los cuales trabajan en la nivelación de estudios de la población penal. Alumnos de nuestras escuelas y liceo fueron atendidos por la Junaeb, lo que, sin duda, ha sido de gran ayuda. Por todo esto solo puedo agradecer la labor que realizan con quienes se encuentran privados de libertad».
Los reclusos que presenten algún tipo de problema visual recibirán lentes ópticos y podrán elegir los marcos de sus anteojos.