Para el diputado PPD y Vicepresidente de la Cámara, Rodrigo González, la noticia dada a conocer por la Agencia de Calidad de la Educación y el mismo Ministro de Educación, Raúl Figueroa de suspender el Simce, y transformarlo en una prueba muestral, no censal como siempre se ha realizado, “es un triunfo de todos quienes desde un principio señalamos que era un despropósito realizar esta medición y el tiempo nos terminó por dar la razón”.
Según González, autor del proyecto para suspender la realización del Simce y la evaluación docente hasta el 2021, la señal entregada por el Ejecutivo debe valorarse, ya que significa un cambio de postura en relación con las declaraciones iniciales desde el Ministerio.
“La tozudez del Ministro no fue suficiente, y finalmente escuchó la opinión que con fuerza levantamos desde el parlamento y la Mesa Amplia por la Educación junto a apoderados, alumnos, docentes y académicos, quienes en reiteradas oportunidades aseguramos que no existían las condiciones técnicas ni sicológicas para realizar el Simce y la evaluación docente. Hoy el foco debe estar en el apoyo emocional, y no en pruebas estandarizadas que en un contexto de pandemia no tienen sustento”.
Dentro de los anuncios, González destacó la importancia de la voluntariedad que se aplicaría a la medición, y ahora se deben conocer los detalles de cómo funcionará este nuevo sistema “es un avance la no realización del Simce como todos lo conocemos durante este año, y especialmente destaco que sea voluntario, ya que no se puede someter a estrés y presión adicional en el escenario que viven millones de familias y sin consecuencias para los colegios. Esperamos a la brevedad conocer la propuesta de la Agencia de Calidad de la Educación, ya que los plazos se acortan y desde el parlamento queremos ser partícipes”.
La Sala de la Cámara analizó la moción parlamentaria para postergar el Simce y la Evaluación Docente, la cual no alcanzó el quorum necesario y regresó a Comisión de Educación, hecho que fue criticado por el diputado González “lamentamos profundamente que la UDI y RN hayan accedido a que se continúe haciendo, a pesar de la pandemia y de la exigencia de los profesores, de los alumnos y de los padres, y de los organismos técnicos, universidades y centros de estudios, una prueba estandarizada que lo único que hace es competir a los niños y generar un ambiente de segregación sin mejorar la calidad de la educación”.