El dirigente explicó que la pesca artesanal ha quedado afuera de las decisiones que está tomando el Consejo Nacional de Pesca y que los comités de manejo no están funcionando.
Muy preocupados se encuentran dirigentes de la pesca artesanal, quienes denuncian que la Subsecretaría de Pesca, en medio de la contingencia por la pandemia de Coronavirus, está tomando decisiones influenciada por la industria y que estarían perjudicando gravemente al sector artesanal.
Miguel Angel Hernández, Presidente de la Federación Nuevo Amanecer, que agrupa a pescadores de caletas de San Antonio a Quintero, en la región de Valparaíso, señaló que “se están tomando medidas de última hora en la Subsecretaría de Pesca. Nosotros ya le habíamos advertido a los ministros de economía que la gobernanza de la pesca en Chile deja afuera al sector artesanal”.
El dirigente explicó que se consultó a dos consejos zonales, sin la participación de la pesca artesanal, decidiendo hacer harina de pescado con fauna acompañante, como corvina, lenguado y otras especies. El Comité de Manejo de la Jibia hace mucho tiempo que caducó y no se han reelegido a los integrantes. Lo mismo pasa en otros Comités de Manejo, donde no están participando los artesanales”.
En el Consejo Nacional de Pesca, nosotros fuimos elegidos hace más de un año designados, y este Consejo ya se ha reunido sin nuestra participación, tomando decisiones muy importantes y que tienen relación directa con la sustentabilidad de los recursos. Un ejemplo claro es el anuncio de la la recuperación del jurel, donde la industria tiene el 90 % y en las costas entre la cuarta y sexta región nosotros no vemos esta especie. También está la recuperación del bacalao, donde se pidió la autorización para que funcione el barco factoría Cisne Verde y se supone que este tipo de naves están prohibidas en Chile. Esto huele a podrido”.
Finalmente Miguel Angel Hernández señaló que “existe un silencio cómplice de algunas organizaciones nacionales de la pesca artesanal con esta situación. Están preocupados de repartirse las migajas que nos está dejando la industria sobre la mesa, y este Gobierno no escucha a las organizaciones de bases, hace oídos sordos con tapones comprado por la industria, tomando acuerdos que afectan, a la sustentabilidad de los recursos. A los compañeros artesanales les hacemos un llamado a informarse y tomar conciencia de lo que está pasando y prepararse para el estallido social que vendrá después de la cuarentena”.