Entre el 1 de julio del 2018 y el 30 de junio del presente año, Conaf registró 905 siniestros en la zona, los que consumieron 4.397 hectáreas. Autoridades del agro realizaron balance del último período alta ocurrencia de emergencias forestales.
El seremi de Agricultura, Humberto Lepe, y el director regional de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), Pablo Mira, realizaron un positivo balance respecto al trabajo de prevención y combate de incendios forestales que se desarrolló en la región de Valparaíso durante el período de alta probabilidad de ocurrencia 2018-2019, que comenzó el 1 de julio del año pasado y culminó el 30 de junio del presente.
La principal autoridad regional de Agricultura afirmó que se registraron “905 incendios, un 8 % menos que la temporada pasada, y a nivel de superficie quemada, 4.397 hectáreas, un 23 % menos. Si bien todavía es una cantidad muy importante de incendios y una cantidad de hectáreas que no nos podemos dar el lujo de seguir perdiendo, es también significativa la disminución, y eso es producto del trabajo realizado tanto por Conaf, como por todos los servicios del agro y todos los que nos colaboraron”.
Por su parte, el director regional de la corporación manifestó que “el éxito estuvo en la cantidad de recursos que tuvimos, muy superior a las temporadas anteriores, y eso se notó en la velocidad con la que llegamos a atacar el fuego. Y lo otro, lógicamente, todo el trabajo preventivo que se hizo durante el año”.
Mira detalló que en la zona operaron “31 brigadas, algo nunca visto en la región, más de 300 combatientes; cuatro aviones; seis helicópteros; y cuatro camionetas PCCode fantásticas, especialmente para las zonas de interfaz, que tienen aparte de agua, elementos químicos, retardante y espuma, lo que las hace muy eficientes en el combate rápido”.
A nivel provincial, entre el 1 de julio del 2018 y el 30 de junio del 2019, la institución forestal contabilizó 300 siniestros en Valparaíso, 225 en Marga Marga, 125 en San Antonio, 124 en Quillota, 54 en Petorca, 49 en San Felipe, 18 en Isla de Pascua y 10 en Los Andes.
Cabe consignar que durante el período de alta probabilidad de ocurrencia de emergencias forestales 2017-2018, la Corporación registró 986 focos incendiarios en la región, los cuales consumieron una superficie de 5.715 hectáreas.
Ministro Walker: Lecciones aprendidas
El ministro de Agricultura, Antonio Walker, resaltó que, a escala nacional, “el aprendizaje más importante fue que la alianza público-privada y el trabajo conjunto entre las distintas instituciones involucradas es fundamental para prevenir y controlar los incendios forestales. Además, la estrategia de golpe único, aplicada en conjunto por Conaf y las empresas forestales, evitó el avance del fuego, al concentrar rápidamente todos los recursos al inicio de un incendio para controlarlo. A ello hay que sumarle el programa del Botón Rojo que entrega información sobre los sectores sensibles a la ignición de fuego, a fin de anticiparnos. Además, la construcción de cortafuegos, que llegó a 3.020 kms., fue otro factor importante, como también el trabajo de la Red de Prevención Comunitaria, a través del cual se ha capacitado a unos 9.500 vecinos”. Toda esta planificación oportuna significó que se logró evitar pérdidas directas (productos tangibles) e indirectas (biodiversidad, belleza escénica, servicios ecosistémicos, entre otras) por US$1.310 millones.