Autoridades en alerta por creciente uso de somníferos

El año pasado hubo un aumento del consumo de fármacos inductores del sueño, siendo uno de ellos incluido en el último listado del ISP de medicamentos más vendidos. Pese a su masivo uso, los somníferos pueden resultar perjudiciales para la salud si se consumen continuamente.

El pasado 27 de diciembre, el Instituto de Salud Pública (ISP) informó sobre los medicamentos más vendidos durante 2021. El estudio reveló un nuevo protagonista en el listado: la Zopiclona, con un total de 2.890.661 unidades vendidas entre enero y octubre de ese año. Estos inductores del sueño, con receta retenida, han gozado de una mayor popularidad gracias a la pandemia, sin embargo sus usos inadecuados pueden resultar ser un peligro.

Los somníferos son depresores del sistema nervioso central, lo cual causa el efecto de somnolencia y letargo que lleva a la persona a dormir. Estos pueden ser útiles a la hora de tener un episodio de insomnio esporádico o para regular el sueño tras un largo viaje, y han demostrado ser accesibles, disponibles y eficaces.

Lamentablemente, estos medicamentos son altamente adictivos y la tolerancia a ellos se desarrolla con rapidez. “Tienen efectos adversos como la resistencia al medicamento, la dependencia y el acostumbramiento, logrando empeorar algunas patologías del sueño”, explicó el neurólogo de Clínica Somno, el Dr. Ignacio Gutiérrez.

Es por esto que siempre es recomendable consultar a un médico y generar hábitos propios para conciliar el sueño de manera más sana y natural, pues el descanso logrado por el consumo de somníferos es inferior. “Este medicamento suprime las etapas de sueño REM que son importantes en el funcionamiento cerebral y en la parte metabólica del cerebro, por lo tanto el sueño bajo el efecto de hipnóticos no es estructuralmente normal; no es un sueño fisiológico, es algo artificial”, detalló el especialista.

Dentro del mismo informe del ISP, se pesquisaron 108 notificaciones de reacciones adversas a la Zopiclona, en las cuales se declararon molestias por somnolencia diurna, sabor amargo y taquicardia.