Conaf mantiene cerrado el entorno silvestre desde el mes de marzo, como medida preventiva frente a la pandemia de coronavirus. Trabajadores de la institución forestal han constatado daños a cercos, acopio de basura y fogatas.
A mediados del mes de marzo pasado, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) decidió cerrar el Parque Urbano Natural La Ligua, como medida preventiva frente a la pandemia de coronavirus. Sin embargo, pese a que la disposición se mantiene vigente, cerca de 300 personas han ingresado de manera ilegal al entorno silvestre.
En ese contexto, durante los últimos cuatro meses de restricción, trabajadores del organismo forestal han detectado actividades como asados, picnics, trekking y ciclismo al interior del “pulmón verde”.
Así lo dio a conocer el director regional de CONAF Valparaíso, Sandro Bruzzone, quien explicó que “los grupos ingresan por diferentes rutas no habilitadas, principalmente por el sector oeste del parque, a la altura del puente colgante, tanto en horario diurno como nocturno”.
“Lo más preocupante es la irresponsabilidad frente a la emergencia sanitaria que enfrenta el país. Hemos sorprendido a un gran número de personas -incluyendo a niños- sin mascarillas ni otros elementos básicos de protección, lo que pone en riesgo no sólo a los infractores sino que también a los trabajadores del recinto”, añadió.
En esa línea, Bruzzone afirmó que “entregaremos todos los antecedentes a la Municipalidad de La Ligua y Carabineros, ya que, además, nuestro personal ha constatado daños en cercos y otras infraestructuras, acopio de basura e incluso vestigios de fogatas, lo cual es peligroso dada la posibilidad de que se generen incendios forestales”.
Flora y fauna
El Parque Urbano Natural La Ligua tiene una superficie de 120 hectáreas, que albergan a más de 30 mil árboles y arbustos (nativos y exóticos), así como a una rica avifauna, donde resaltan especies como el zorro chilla, el cururo y el quique, junto a alrededor de 60 variedades de aves.
Cabe consignar que el terreno es de propiedad del municipio local, que cedió en comodato la administración a Conaf, con el propósito de fomentar la conservación de la biodiversidad y la educación ambiental en la comuna.